Después de dos obras voluntariosas. ‘Piedras’ y ‘Veinte centímetros’, Ramón Salazar firma esta excesiva, desbordante película, que hace dudar de si algún día abandonará su condición de eterna promesa. La premisa es excelente, presenta a un chico con terribles relaciones familiares, sobre todo con su madre. Escapará a París y a Berlín en busca del pasado y del futuro. Pero el desarrollo es confuso y atropellado, mezcla realidad y sueño con poco sentido de la medida y da lugar a largas escenas alucinadas que a veces parecen repetirse sin fin.

Reseña
10.000 noches en ninguna parte
Time Out dice
Discover Time Out original video