Fue la mano de Dios

Maradona, el 22 de junio de 1986, marcó el gol más polémico de la historia del fútbol, ​​empujando el balón con la mano y llevando a Argentina al éxtasis. Pero fue en su regreso a Nápoles cuando la pasión por el futbolista ardió con más efervescencia. Y a los napolitanos como el adolescente Paolo Sorrentino no podía importarles menos que le hubiera marcado con la mano, con la cabeza o con el culo.

El recibimiento en Nápoles de la llamada “mano de Dios” se recrea en mitad de unas memorias cinematográficas a menudo sublimes y a veces frustrantes, pero siempre evocadoras y conmovedoras. Es una sinfonía de cláxones de coches y gritos de alegría, en una historia sobre hacerse mayor que se basa íntimamente en la juventud del escritor y director italiano a través de los ojos del fabuloso Fabietto, interpretado por Filippo Scotti.

Aparte de los futbolistas emblemáticos, 'Fue la mano de Dios' tiene como telón de fondo las aguas azules del golfo de Nápoles y el tapiz de una larga vida familiar que es un placer presenciar. Y como 'Call me by your name', una representación todavía más sensual del despertar sexual y la angustia juvenil, también es una película sobre cómo son las cosas a las que nos enganchamos a lo largo del camino: las películas, los héroes deportivos, la música, los contrabandistas de cigarrillos.

Dir. Paolo Sorrentino (Italia, 2021). 130 min. Estreno el 3 de diciembre.