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¿En qué clase de paraíso suburbano las mamás que gustan del soccer lucen como Catherine Zeta-Jones, Uma Thurman y Jessica Biel? El mismo lugar, evidentemente, en el que el equipo local es dirigido por a estrella de futbol (Gerard Butler) un escocés guapo quien viaja a Virginia para recuperar a su esposa (Jessica Biel) y su hijo menor (Noah Lomax) a quienes abandonó años atrás. Pero cuando George acepta entrenar al equipo de fútbol de su hijo, se le viene encima todo un desfile de atractivas mamás burguesas, encabezadas por Barb (Judy Greer), Denise (Catherine Zeta-Jones) y Patti (Uma Thurman), que competirán por sus afectos como si del terreno de juego se tratara. Y también el patrocinador del equipo de fútbol, el adinerado Carl King (Dennis Quaid), que aprovecha la oportunidad para presumir ante sus socios de lo amigo que es de la estrella deportiva local.
Básicamente, Jugando por amor es una comedia empalagosa del director Gabriel Muccino, quien presenta una historia con todos los clichés posibles, pero amamos las comedias románticas, ¿o no?