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La Gran Manzana como escenario, animales como protagonistas de la historia, una aventura redentora y una animación muy definida y colorida. Con todo eso pareciera que La vida secreta de tus mascotas lo tiene todo para triunfar en la taquilla como uno de los 10 blockbusters del verano de 2016.
La premisa del filme que dirigen Yarrow Cheney y Chris Renaud atrapó a niños y a adultos desde los primeros tráilers, pues plantea que las mascotas empiezan sus propias vivencias en cuanto el humano sale de casa: poodles que cambian la música clásica por el rock, un ave que se las ingenia para salir de su jaula y crea su propio juego de realidad virtual, y la gata que aprovecha la ausencia para asaltar el refrigerador y olvidarse de sus croquetas de dieta.
Max es el galán y rey del departamento de Katie, una joven amorosa con su mascota que un día decide adoptar a Duke, un perro mestizo, lanudo y de buen corazón. Sin embargo, Max no estaba preparado para tener otro roomie en su pequeño departamento de Nueva York, y es por eso que empieza la aventura.
Hasta aquí parece una historia divertida y original, pero en la realidad carece de este último punto y eso también le resta diversión en algunos momentos. La vida secreta de tus mascotas retoma muchos elementos de Toy Story: el gran amigo del humano se encela de la llegada de un nuevo miembro al equipo, en su intento por deshacerse de él ambos terminan perdidos y al borde del peligro –lo cual los obliga a colaborar–, un villano de apariencia tierna que le hace competencia a Lotso (Toy Story 3)… y el resto no es sorpresa.
Pese a estar muy alejada de las llegadoras y humanizadas animaciones de Pixar, La vida secreta de tus mascotas ofrece personajes que conquistan por su aspecto y peripecias; además, deja varios mensajes para toda la familia –el trabajo en equipo, la adopción de mascotas y el respeto a los animales–. Y no, no debes traer un bonche extra de servilletas para la lágrima traicionera, la comedia es la reina de esta cinta –aunque a veces ésta encaja forzadamente– y la carcajada sale fácil ante los tropiezos de esta pandilla neoyorkina.