El director chino Zhang Yimou ha pasado por todas las etapas posibles, desde el cine reducido a la mínima esencia de los inicios hasta el más barroco de la última etapa. Pero desde que dirigió la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos no ha conseguido volver a situarse en el lugar de privilegio que llegó a ocupar. Las dos últimas películas, 'Amor bajo el arce blanco' y 'Las flores de la guerra', están basadas en dos novelas de autoras contemporáneas (Ai Mi y Geling Yan), que se trasladan al pasado para narrar hechos históricos significativos, en el caso que nos ocupa alrededor de la masacre de Nanking. 'Las flores de la guerra' es una superproducción con estrella internacional incluida, en la que resulta complicado distinguir los rasgos de grandeza y personalidad del director. Subraya las emociones de una manera descarada y representa un acercamiento nada riguroso a una tragedia lastrada por el sensacionalismo. Parece que estemos ante un telefilme endulzado de alto presupuesto, y lo que es peor, cargado de un sentimiento patriótico bastante sospechoso.
Discover Time Out original video