Hoteles gastronómicos para dormir y comer muy bien por España

Es el mejor hotel de lujo de España (primer puesto en la lista '10Best List 2023' según los prestigiosos Beyond Luxury Awards), y el hotel con el mejor desayuno (así lo ha elegido el jurado de Madrid Fusión 2024 en la entrega del primer premio patrocinado por Binter), motivos más que suficientes para que el Hotel Finca Cortesin, no falte en cualquier lista de hoteles para dormir y comer (muy bien) al menos una vez en la vida. Una maravilla de la arquitectura hotelera, levantado como si fuera un pueblo blanco andaluz (fachadas blancas, buganvillas en tonos fucsia) y un paraíso para todos los sentidos ubicado en la malagueña Costa del Sol. 

Canfranc Estación. A Royal Hideaway Hotel acaba de abrir, y ya ha recibido un premio al mejor interiorismo hotelero. Ha sido gracias a su proyecto de recuperación de una antigua estación ferroviaria del siglo XX, inaugurada hace casi un siglo, y convertida en hotelazo de inspiración Art Decó de los años 20: con un lobby monumental, una escalinata rescatada de las antiguas escaleras que daban acceso a la estación y una recepción que reinterpreta las antiguas taquillas de las grandes estaciones de tren europeas del siglo pasado. Y esta rehabilitación no es el único hito de este emblemático hotel de 104 habitaciones que recuerdan al interior de los coches-cama de aquellos años 20. Además de ser miembro de una de las cadenas hoteleras con más prestigio (A Royal Hideaway, de Barceló, reconocida por la puesta en valor de edificios históricos vinculados a la identidad local del territorio), puede presumir de restaurante con Estrella Michelin: Canfranc Express, que apuesta por la gastronomía aragonesa coninflluencias galas y productos locales desde un antiguo vagón de tren. 

Con permiso del icónico Akelarre de Pedro Subijana, la llegada del primer hotel de Robert De Niro a San Sebastián confirma la excelencia gastronómica de la hotelería de la ciudad. Y no solo, sino que esta esperadísima novedad supone no solo la reapertura del Palacio Vista Eder (una casa palaciega en el centro de la bahía de la Concha) sino la llegada de uno de los restaurantes japoneses más populares del mundo a la ciudad. A sus vistas panorámicas (un regalo para los sentidos que se puede disfrutar desde cada suite) y a su estudiadísimo interiorismo (que fusiona el minimal japonés con el espíritu cosmopolita más neoyorquino), hay que sumar su exquisita y sofisticada gastronomía, un trío de ases que lo convierten en la excusa perfecta para volver a dejarse caer por la ciudad donostiarra en cualquier momento. Solo tiene 17 habitaciones, diseñadas y decoradas con un interiorismo de lujo tan exquisito que brillan tanto como su cocina, a cargo del reconocido chef Nobu Matsuhisa, el socio de De Niro en esta marca que nació en los 90 y que ya tiene más de 50 restaurantes en todo el mundo. Deseando estamos de que lleguen a Madrid, con la apertura del primer Hotel Nobu Madrid, prevista para 2025. 

Un restaurante familiar en Casas-Ibáñez, un pueblo perdido en Albacete, se ha convertido en apenas cuatro años en sello de garantía para una escapada de mucha calidad. Porque si de algo puede presumir Cañitas Maite, nombre de esta casa de comidas convertida en flamante negocio hostelero, es de ser una marca que transforma en oro (y estrellas) todo lo que toca. El Hotel Restaurante Cañitas Maite es un pequeño local que, después de 65 años como empresa familiar, ha sido reformado por la siguiente generación (Javier Sanz, junto a Juan Sahuquillo) para convertirlo en el destino gastronómico que es hoy. Turismo rural y alta cocina en el corazón de la comarca de La Manchuela, rodeado del icónico paisaje de las hoces del Júcar y el Cabriel. Además de buen tapeo (suya es la mejor croqueta de jamón ibérico del mundo, elegida en la última edición de Madrid Fusión), cuentan con un menú degustación de temporada que es toda una oda al territorio. Ellos son también los autores de varios proyectos gastronómicos más: desde la cocina de Cebo, en el madrileño restaurante Urban (premiado en 2023 con su segunda Estrella Michelin) y Oba- (en la planta superior de Cañitas Maite y que acaba de recibir su primera Estrella Verde). Todos rumbo a Albacete ya. 

El casco histórico de Cáceres es uno de los entramados medievales mejor conservados de España, declarado Patrimonio de la Humanidad, y el hogar del único tres Estrellas Michelin de la provincia: Atrio Hotel Restaurante (miembro del prestigioso club Relais Chateaux). Le sobran los motivos para ser un destino gastronómico en sí mismo. Si podéis permitiros del lujo de comer en este restaurante (el mejor representante de la cocina y la despensa local extremeña), de visitar su bodega (una de las tres bodegas privadas más importantes del mundo), de dormir en esta obra de arte (un flamante edificio mimetizado con el patrimonio del casco histórico de Cáceres, obra de los arquitectos Tuñón y Mansilla, los mismos que firman la vecina Fundación Helga de Alvear, o la recién estrenada Galería de las Colecciones Reales), o de estrenar su última ampliación en la Casa Palacio Paredes Saavedra (una casa palacio del siglo XVI que, entre otras obras de arte, guarda en una de sus habitaciones grabados originales de Goya), no perdáis la oportunidad de hacerlo. 

Eunice Hotel Gastronómico es el preciosísimo (y recién estrenado en febrero de 2024) hotel boutique del que todo el mundo está hablando ya. Y no es para menos: se trata del primer hotel gastronómico de Salamanca, de categoría cinco estrellas Gran Lujo, elegante a más no poder y con el chef salmantino José Manuel Pascua al frente (si no sabes quién es, te contamos: nieto de Eunice, la mujer que dio vida a una de las casas de comida míticas de la ciudad, Bambú, en la que José Manuel ha trabajado y ha actualizado bajo el concepto Tapas y Brasas con éxito de crítica, público y admiración familiar). 

Un antiguo molino harinero (de ahí el nombre) esconde uno de los secretos mejor guardados de la provincia de Guadalajara: Hotel & Spa Molino de Alcuneza. Un hotelito rural totalmente inesperado, perdido en una pedanía de Sigüenza, que puede presumir de varios hitos: el primero, que forma parte de la exclusiva red de alojamientos con 'charme' (que dirían los franceses) Relais & Chateaux. Solo 18 habitaciones, una piscina al aire libre con el paisaje de la Serranía de fondo y un spa para dos con vista panorámica. Y segundo, su restaurante, con una estrella Michelín desde 2018 y una Estrella Verde recién estrenada en 2023, gracias a una cocina de autor con la que se rinde homenaje a los productos del entorno, el cultivo ecológico y los sabores tradicionales de la pronvicia.

El Hotel Majestic abrió sus puertas por primera vez en 1918, y casi en ese mismo momento se convirtió en todo un icono de hospitalidad y estilo de la alta burguesía catalana, que lo elegían como escenario de sus celebraciones más especiales. Más de cien años después, y tras varias reformas, continúa manteniendo intacta su elegancia de principios de siglo y no deja de cosechar premios: el último y más gastronómico lo convierte en el hotel de lujo con el mejor brunch de España (su desayuno también fue premiado como el mejor). Y no nos extraña, teniendo en cuenta que el reconocidísimo chef Nandu Jubany (una Estrella Michelin) es el asesor de la parte culinaria del hotel. Gracias a su propuesta, que sigue el concepto de 'farm to table' (o lo que es lo mismo, de la huerta a la mesa, con productos de proximidad y típicos de la dieta mediterránea), el brunch de SOLC (así se llama el restaurante del Majestic) es uno de los clásicos de los domingos de Barcelona. Y motivo más que suficiente para hacer una escapada a la ciudad. 

Casi sin darnos cuenta, la capital de la Costa del Sol vuelve a brillar a golpe de alta cocina (muy para sibaritas, sí, pero con precios para todos). Y mucha culpa la tiene este hotel, Puente Romano Beach Resort, reconvertido (con mucho tino y acierto) en el nuevo destino gastronómico de Marbella. Suyo es el mérito de que Dani García haya reabierto las puertas de su Bibo, o de la llegada a Europa del primer Coya (uno de los mejores restaurantes peruanos), además del italiano Cipriani (un restaurante que nació en un humilde local junto a los canales de Venecia y hoy es uno de los italianos favoritos de los famosos), Gaia (uno de los mejores restaurantes griego-mediterráneos del mundo), Nobu (del chef japonés Nobu Matsuhisa, socio de Robert De Niro en la cadena hotelera del mismo nombre)... Y parece que la lista de nuevas incorporaciones seguirá creciendo en próximos meses, como "parte del compromiso del resort con la excelencia gastronómica". Así lo confirma su directora de Márketing, brillante profesional y siempre encantadora Cristina Borges: "Con la incorporación de nuevas marcas y la apertura de restaurantes de renombre, estamos comprometidos a ofrecer a nuestros huéspedes experiencias culinarias inigualables". Y vaya si lo son. 

Este es el primer hotel Four Seasons de Madrid. Abierto junto a la puerta del Sol, en la plaza de Canalejas, su sola presencia ha convertido la zona (puerta de entrada al barrio de Las Letras) en la nueva Milla de Oro de la capital. Porque dormir en una de sus 200 suites puede costar entre 700 y 2.000 euros la noche; lo de la Suite Real (antiguo despacho de Mario Conde) ya es otro nivel: el coste asciende a más de 20.000 euros. Pero como sucede en la hotelería de calidad, no todo es domir. En su magnífica azotea espera Dani Brasserie (el restaurante de Dani García), en la séptima planta del hotel y con una carta que resume parte de su trayectoria y en la que sobresalen algunos iconos del recetaro tradicional andaluz. Sofisticación y popularidad con las que posiblemente sean unas de las mejores vistas de los tejados de Madrid desde ese lujoso esquinazo entre la calle Alcalá y la Puerta del Sol.