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Durante la Semana Santa de 2015 se produjo un atraco que conmovió a la opinión pública inglesa. Los ladrones entraron en la cámara acorazada de la más elegante joyería de Londres y se llevaron más de 200 millones de libras en joyas y dinero. Lo que hizo que fuera espectacular fue que los autores eran cuatro hombres de más de 60 años. El film de Thompson se inscribe en el más convencional género de atracos. La primera parte nos muestra la planificación del golpe, la segunda parte se centra en la ejecución del golpe. Un epílogo nos cuenta lo que sucedió con los ladrones cuando los cogieron. Lo que es una lástima es que el robo y los cuatro ancianos que lo llevan a cabo sean mucho más interesantes que la aburrida película que los retrata.