[title]
Luego de representar el mismo papel en una obra Off-Broadway, la actriz Glenn Close se dio a la tarea de producir y coescribir esta adaptación que alcanzó tres nominaciones en la pasada entrega del Oscar –mejor actriz, actriz de reparto y maquillaje–, aunque al final se quedó sin nada.
El Albert Nobbs del título (Close en una actuación calculada y siempre contenida) es un mayordomo que trabaja en un hotel de Dublín a principios del siglo XIX. El silencioso, casi insignificante, pero siempre afable Albert guarda un enorme secreto: en realidad él es una mujer, quien ha decidido vivir como varón para poder acceder al trabajo que de otra forma le sería negado. La actuación de Close es admirable, pero el patetismo de su personaje resulta abrumador, al grado de que sólo es posible sentir lástima antes que empatía con Nobbs.
Dirigida por el colombiano Rodrigo García, cuya filmografía casi en su totalidad se ha enfocado a diseccionar toda variedad de temas femeninos, pierde aquí la brújula al no encontrar un mensaje claro que transmitir: no reflexiona sobre el rol de los géneros ni sobre la sexualidad, incluso tampoco sobre la femineidad. Una historia triste, bellamente actuada, pero que nunca se atreve a más.