9 discotecas para salir de fiesta por Sevilla

¿Qué es?: El club referente de la música en directo en Sevilla.

¿Por qué ir?: Si lo que se quiere es disfrutar de música de la buena, del mejor sonido de toda Sevilla y de un ambiente sano y agradable, este es el lugar. La Sala X abrió sus puertas en septiembre de 2014 y desde entonces no ha hecho más que cosechar éxitos. Y es que su programación de conciertos ocupa prácticamente todos los días del año.

¿Qué es?: El templo de la música electrónica en la capital hispalense.

¿Por qué ir?: Ubicado en el barrio hispalense de Nervión, este club, considerado el templo de la electrónica en la ciudad de Sevilla, cuenta con capacidad para unas 350 personas. Semana tras semana propone una programación formada por los DJ´s más aclamados tanto nacionales como internacionales con los que el público disfruta de unas noches repletas de ritmo y buen ambiente. 

¿Qué es?: Un club donde la elegancia y el lujo son los grandes protagonistas.

¿Por qué ir?: Desde lámparas de araña a paredes decoradas con fotos vintage y diseños únicos: así es Rockefeller, una discoteca situada en el barrio de El Arenal, uno de los más animados del corazón de Sevilla. La elegancia y el glamour se sienten aquí desde que se pone un pie en el interior, donde no se escatima en lujos ni en un solo detalle detalle. Por ejemplo, en su barra, compuesta por una gran variedad de licores de la mejor calidad.

¿Qué es?: El gran referente de la “Movida sevillana”.

¿Por qué ir?: Porque el Fun Club, en pleno barrio de La Alameda sevillana, forma parte de la historia musical de la ciudad. Tras convertirse en un referente de la música en directo durante los 80 y los 90, esta sala conserva la esencia del pasado plasmada en sus paredes, decoradas con fotografías de todos los grupos que por allí han pasado, y en el propio ambiente del negocio.

¿Qué es?: El ambiente más exclusivo en un antiguo palacio del siglo XIX.

¿Por qué ir?: Situado en un enclave único, el emblemático Palacio Pickman, y en pleno centro de la ciudad, junto al Puente de Triana, Lobby Room puede definirse como el club más exclusivo y elegante de todos cuantos hay en la capital hispalense. Lo más llamativo son sus diferentes espacios: desde una biblioteca con miles de libros a una pista de baile ubicada en un original patio de columnas, o una enorme barra central.

¿Qué es?: Una agradable sala en el que disfrutar de la música en directo.

¿Por qué ir?: Con un aforo aproximado de 300 personas, la Sala Malandar abrió sus puertas en Sevilla hace más de una década y en su espacio se puede disfrutar tanto de conciertos en directo como de sesiones de DJs hasta altas horas de la madrugada. Se encuentra a solo un paseo de la Alameda de Hércules, zona de referencia en Sevilla para salir de fiesta, y es una buena opción para aquellos que quieren continuar disfrutando de la noche cuando el resto de bares del barrio cierran sus puertas.

¿Qué es?: El club más divertido y desenfadado para salir de fiesta en Sevilla.

¿Por qué ir?: Porque en Obbio nada puede salir mal: el éxito siempre está asegurado. Este famoso club sevillano lleva años ambientando las noches hispalenses con todo tipo de espectáculos y actuaciones que animan a un público de lo más ecléctico. Y es que aunque las puertas de Obbio están abiertas a todo aquel que quiera pasarlo bien, suele ser bastante frecuentado por la comunidad LGTB.

¿Qué es?: Una deslumbrante discoteca de vocación cosmopolita.

¿Por qué ir?: Abierto desde el año 2005, Abril es una discoteca con capacidad para 800 personas que desde sus inicios apostó por ofrecer al público sevillano algo diferente: un club inspirado en los grandes neoyorkinos de la talla de Studio 54 o The Loft, pero con raíces hispalenses. Pero Abril es mucho más que una discoteca.

¿Qué es?: Un espacio multifuncional en el que vivir la noche sevillana en la Isla de la Cartuja.

¿Por qué ir?: Ocupa lo que en la Exposición Universal del 92 fue el Pabellón Olímpico y cuenta con un espacio de 2500m2. Antique se ha convertido en una de las discotecas referentes de Sevilla, caracterizada, sobre todo, por un ambiente exclusivo y una clientela entre la que se encuentran nombres conocidos del ámbito deportivo, musical o cinematográfico.