1. Malbec de Finca La Anita


Este Malbec nace en Agrelo, Luján de Cuyo, uno de los lugares clásicos de Mendoza para esta variedad. Sus viñedos, a 1100 metros de altura, recorren 21 hectáreas que le dan al vino distintas expresiones dentro de la misma finca.
A simple vista, enamora con su color rojo carmesí profundo y destellos violetas. En nariz es súper expresivo: aparecen frutas negras maduras, flores azules, especias dulces, pimiento rojo y un toque de pimienta blanca. En boca es envolvente, con mucha presencia, taninos suaves y jugosos, buena frescura y un final que se siente largo.
El dato: es ideal para una cita íntima o una comida familiar de domingo. ¿Su maridaje soñado? Ravioles de hongos de pino con una bolognesa casera, bien sabrosa.
Dónde conseguirlo: en vinotecas y algunos supermercados de todo el país o en el siguiente link.