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Beto Gutiérrez
Beto Gutiérrez

De Recreo a Louis Vuitton: la historia del diseñador argentino Cristián Mohaded

Desde Catamarca a Louis Vuitton, su trabajo redefine el diseño argentino con identidad y poesía.

Pilar Tapia
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Desde Recreo, un pequeño pueblo de Catamarca, Cristián Mohaded fue construyendo una mirada sensible y poética que hoy deslumbra en las capitales del diseño. Fue el primer argentino en presentar una colección para Louis Vuitton, y sus piezas, entre lo artesanal y lo contemporáneo, condensan una identidad profundamente arraigada en el paisaje, las tradiciones y la intuición. Su obra es un puente entre la memoria y la materia, entre lo que lo formó y lo que lo proyecta al mundo.

Recreo, Catamarca, siempre vuelve en tus relatos. ¿Qué queda en vos de ese niño que creció allí? ¿Cómo creés que ese entorno, esa infancia, sigue influyendo en tu mirada como diseñador hoy?

Sí, creo que la infancia nos marca mucho: el contexto en el que crecimos, el hacer de todos los días. Recreo es un pueblo chico, no había muchas cosas para hacer y uno intentaba entretenerse con lo que tenía al alcance. Para mí, las siestas eran muy creativas: me ponía a pintar, a dibujar. Intuitivamente hacía cosas, porque necesitaba poner en acción mi creatividad todo el tiempo.

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Manuel MazzaroCampo de Torres, 'Territorio Híbrido' en el Museo Nacional de Arte Decorativo.

Más allá de mi pueblo, mi provincia y mi país, que los amo, se identifican mucho en mi trabajo. Desde chico me gustan las artesanías, las cestas que había en mi casa, las manualidades. En la infancia me gustaba mucho hacer cosas, en la escuela también: hacía la escenografía para los actos escolares, los carteles... Tenía esta cosa de estar siempre proponiéndome para hacer cosas.

Mi provincia y mi país se identifican mucho en mi trabajo

Fuiste el primer argentino en diseñar una colección para Louis Vuitton y trabajaste con marcas icónicas como Roche Bobois. ¿Qué sentís que distingue al diseño argentino, o a tu propia identidad como diseñador argentino, en esos escenarios internacionales?

No sé si puedo hablar del diseño argentino, pero sí puedo hablar de mi trabajo, de cómo creo que se identifica y cómo eso repercute en otras marcas. Creo que las marcas de afuera están buscando otras miradas: de diseñadores latinoamericanos, de todos los continentes más allá de Europa. Y hay algo importante que siempre digo: uno tiene que ser muy fiel y honesto con su trabajo. Yo lo llevo en la sangre, lo tengo en el ADN, no puedo ir contra algo que no soy. Es parte de mi mirada.

Uno tiene que ser muy fiel y honesto con su trabajo

Siempre digo también que uno tiene que mirar alrededor, mirar eso que lo abraza, y a partir de ahí empezar a trabajar. Después, sí, empezar a mirar hacia afuera. Estamos muy acostumbrados a hacer al revés: mirar afuera e intentar que eso pase acá. Yo intento lo contrario. Primero miro acá, y después intento que eso se observe afuera. Creo que eso es lo que más se ve en mi trabajo, y por eso estas marcas también ven algo diferente y me convocan.

Primero miro lo que sucede en Argentina, y después intento que eso se observe en el exterior

Tus piezas tienen algo muy escultórico, casi poético. ¿Cómo es tu proceso creativo? ¿Qué te inspira primero: el material, la forma o la historia que querés contar?

Cada proyecto tiene su fórmula. Cada empresa, cada cosa que uno hace, empieza desde un lugar distinto. A veces puede ser un paisaje, un material, algo que vi adentro de una empresa y me llamó la atención. Puede ser una historia, sobre todo en proyectos más ligados a la artesanía. Uno tiene que ser libre en eso. No creo mucho en los programas de diseño o las cosas demasiado direccionadas. Creo que parte de lo que estoy aprendiendo es a escucharme a mí mismo, a ser intuitivo. Esa es una de las capacidades con las que más me identifico. Tengo una intuición muy desarrollada y me dejo llevar por eso. Eso es lo que hace que los proyectos sean auténticos. A uno le puede gustar, a otro no, pero es lo que me sale, lo que siento que va bien. También trato muchas veces de entender dónde estoy parado, para quién estoy diseñando y por qué, para poder dar respuesta a eso. Y a veces, simplemente, son ideas que tengo en la cabeza, que me llevan a explorarlas y luego terminan siendo un proyecto. A veces pueden pasar años entre una idea, un concepto, una narrativa... y después, de repente, reaparecen y tengo todas las herramientas para darles forma.

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Cristián MohadedSillones J.M.Frank

Me formé como diseñador industrial en la Universidad Nacional de Córdoba, pero también tengo esa mirada más artística, más poética. Esa combinación, creo, es la que da un resultado diferente. También tiene que ver con lo que viví: mi abuela pintaba, mi mamá hacía manualidades... Siempre me atrajo eso. En principio, yo quería ser artista. Lo de ser diseñador fue una casualidad. Se cruzó en mi camino y lo elegí porque me gustaba dibujar y sentí que podía ser algo creativo. Me formé así, pero en mi cabeza y en mi cuerpo todo es uno, y se mezcla, se combina. Se arma ese blend que, de alguna manera, enriquece el contenido.

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Manuel MazzaroSofá 'Federal'

La naturaleza y el paisaje parecen tener un rol central en tu trabajo. ¿Hay una búsqueda consciente de conectar lo artesanal y lo contemporáneo? ¿Cómo convivís con esas dos dimensiones en tus diseños?

Con respecto a lo artesanal y lo contemporáneo, también siento que como cultura muchas veces nos perdemos. Nos gusta la parte artesanal, pero creo que no siempre le damos el valor que merece. Hay que ser más conscientes del esfuerzo y del saber que hay detrás de todo eso. Yo valoro mucho lo artesanal, e intento, en algunas ocasiones, romper un poco con la dinámica tradicional, siempre desde el respeto a las personas con las que trabajo. Busco otro lugar para la artesanía. No un lugar de “mayor valor”, porque el valor ya lo tiene, y sería irrespetuoso decir lo contrario. Es buscarle otro lugar. Creo que justamente la herramienta de haberme formado como diseñador, y de tener una mirada artística que realmente está presente en mi proyecto, hace que ese triángulo, ese mix de saberes, se plasme en un mundo contemporáneo que busca otras cosas. Intento llevarlo hacia ahí.
También me importa tratar estos temas porque siento que cada vez nos alejamos más, le prestamos menos atención. Y creo que ahí está una de nuestras mayores potencias. Solo hay que saber trabajar con lo que tenemos.

¿Hay algún sueño que aún te quede por cumplir? ¿Algún proyecto, colaboración o material con el que todavía no hayas trabajado y te gustaría explorar?

La verdad es que no me planteo mucho esas cosas. Siento que la vida y mi carrera profesional me fueron llevando, poniéndome en lugares diferentes, de mucho crecimiento y mucho aprendizaje. Todos los días aprendo. No estoy en la búsqueda de un sueño puntual. Obviamente, uno quiere sostener lo que hace, crecer, ser más. Creo que ese sería el sueño: ser más, poder sostener esto. Porque la carrera de un diseñador es difícil, lleva mucho tiempo, mucho esfuerzo. Todos los días hay que remar y ponerle energía. Mi sueño, entonces, quizás sea seguir teniendo trabajo, poder seguir mostrando mi mirada y que cada vez sea más visible, para poder contar todo lo que tengo adentro. Que eso llegue a los demás.

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Cristián MohadedSillas 'Z' y 'L'

¿Tenés algún referente, dentro o fuera del mundo del diseño, que haya marcado especialmente tu camino?

Sí, como referentes del diseño, los hermanos Campana son artistas, creadores, creativos que me inspiraron mucho. Me mostraron que el diseño puede tener mucho para decir, para contar, para explorar, más allá de la industria. Y eso siempre me lo cuestioné.

A nivel nacional, admiro mucho el trabajo de Alejandro Sarmiento, Diana Cabeza y Ricardo Blanco. Fueron personas que, para mí, tuvieron una incidencia muy interesante. Iba a escucharlos cuando daban charlas en la universidad. Me atraía cómo pensaban, más allá de lo que hacían. Y también, en cuanto a diseñadores de gran trayectoria, admiro a Patricia Urquiola y Gaetano Pesce, que tienen una exploración morfológica, material, de color, que me interesa mucho. En el mundo del arte, me gustan Lucho Fontana y Donald Judd, que tienen una mirada más minimalista, que también me atrae mucho.

Ping pong de palabras rápidas

La Ciudad de Buenos Aires en una palabra: Hermosa

Recreo, Catamarca, en una palabra: Paz

Un lugar que te inspire en la ciudad: El campo

¿Ciudad o naturaleza? Naturaleza

Un objeto que ames: Un cuaderno para dibujar

Una comida que te transporte a tu infancia: Milanesas con puré de papas

Tu lugar feliz: Mi casa

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