1. Aida


En una tranquila esquina de Villa Luro, Aida se presenta como uno de esos lugares que hacen felices a grandes y a chicos. Con espíritu de bodegón moderno, este restaurante y café combina porciones generosas y platos sabrosos con un espacio de juegos enorme y muy bien equipado. Desde un pelotero con obstáculos, disfraces y juegos de rol, hasta metegol, consolas de videojuegos y cuidadoras que acompañan a los más pequeños, el plan está resuelto para que nadie se aburra.
La carta incluye menú infantil con opciones como milanesitas, hamburguesas y pastas, además de postres especialmente pensados para los más golosos. Ideal para un almuerzo en familia o una merienda extendida, Aida logra esa combinación ganadora: buena comida, espacio amigable y chicos contentos.
El dato: recomendamos dejar lugar para el postre y pedir la cookie XL con helado que llega a la mesa como una fiesta.
Dónde: Pola 299, Villa Luro.