la-piccola
La Piccola
La Piccola

Día Internacional de la Pasta: los mejores lugares para comer pastas caseras en Buenos Aires

El 25 de octubre rinde tributo al plato más amado del mundo: la pasta. En esta guía te contamos dónde probar las mejores versiones en Buenos Aires, desde clásicos de Recoleta y bodegones con historia hasta propuestas modernas y plant based que reversionan.

Pilar Tapia
Publicidad

El 25 de octubre se celebra el Día Internacional de la Pasta, y en Buenos Aires sobran motivos (y lugares) para rendirle homenaje con tenedor en mano. Desde bodegones modernos hasta trattorias elegantes y propuestas veganas, la ciudad ofrece una vuelta al mundo (de Italia a Palermo, pasando por Recoleta y Núñez) sin salir del plato. Acá, una selección de restaurantes donde la pasta no es solo comida: es cultura, herencia y puro placer.

1. Raggio Ostería

En Palermo, el chef boloñés Sebastián Raggiante trae un pedazo de Italia a Buenos Aires. Acá no hay atajos: las pastas se hacen con productos de estación y técnicas que respetan la tradición familiar. En la carta de Raggio hay desde un spaghetti alla chitarra con carbonara clásica hasta conchiglioni alla puttanesca o gigli con mariscos de Mar del Plata. El cierre ideal: su panna cotta casera, ya convertida en emblema del lugar.

Dónde: Gurruchaga 2121, Palermo.

2. Mare by Fran

En Puerto Madero, Mare by Fran combina elegancia mediterránea y frescura porteña. Su carta propone un recorrido por texturas y sabores donde las pastas se cruzan con mariscos y vegetales, siempre acompañadas por una cuidada selección de vinos. Un espacio donde la técnica italiana se mezcla con estética contemporánea.

Dónde: Alicia Moreau de Justo 1170, Puerto Madero.

Publicidad

3. Hierro Bodegón

En el corazón de Palermo Hollywood, Hierro Bodegón reinterpreta el clásico porteño desde una mirada moderna. Cocina de raíz, estética sofisticada y hospitalidad descontracturada se combinan en este “bodegón neofolk” donde lo popular y lo contemporáneo conviven con naturalidad.

Entre sus pastas —todas caseras y elaboradas a diario— brillan los ñoquis de papa con estofado de ternera, los canelones de acelga, ricota y almendras con salsa blanca, y los ravioles de ricota con pomodoro y albahaca. Platos simples, reconfortantes y llenos de identidad.

Dónde: Fitz Roy 1722, Palermo.

4. Casa Veltri

En una casona histórica de Recoleta, Casa Veltri reinterpreta la cocina ítalo-porteña con la elegancia de Capri y el pulso contemporáneo de Buenos Aires. Abierto todo el día, combina restaurante, café, pastificio y mercato. En la carta —diseñada por el chef boloñés Sebastián Raggiante, el mismo detrás de Raggio Ostería— hay clásicos como los agnolotti del plin con crema de parmesano, risotto mare e monti, o la saltimbocca alla romana. Un homenaje a la tradición italiana en clave moderna, en un entorno sofisticado y luminoso.

Dónde: Juncal 1642, Recoleta.

Publicidad

5. La Piccola

En Palermo, La Piccola eleva la pasta fresca al nivel de declaración de principios. Cada masa se prepara artesanalmente con harinas seleccionadas y huevos frescos, logrando esa textura perfecta que distingue a una buena pasta. En la carta: ravioloni de brasato, pappardelle con crema de funghi y aceite de trufa, o gnocchi hechos cada día. Tradición pura, sin artificios.

Dónde: El Salvador 5801, Palermo.

6. Sottovoce

Clásico de Recoleta, Sottovoce lleva más de veinte años siendo sinónimo de cocina italiana impecable. Su salón elegante acompaña platos como el rotolo alla bolognese o los spaghetti negros con langostinos. Pastas caseras de sémola y huevo, preparadas con la precisión de un taller artesanal. Un ícono porteño que sigue marcando la diferencia.

Donde: Av. Libertador 1098, Recoleta.

Publicidad

7. Il Quotidiano

Il Quotidiano transformó lo cotidiano en un ritual urbano. Es el único bar de pastas de Buenos Aires y sus locales —en Alto Palermo, Belgrano, Caballito, Nordelta, Las Cañitas, Palermo, Recoleta, Recoleta Urban Mall y Ronda DOT— son paradas obligadas para los fanáticos de la pasta al dente. Todo se hace in situ, fatto a mano, todos los días. Así de simple. Así de bueno.

Dónde: varios locales en CABA y GBA.

8. Ambrosia

En Puerto Madero, Ambrosia transmite el sabor del sur de Italia con espíritu familiar y alma calabresa. Detrás del proyecto está una familia de italianos que, hace dos años, decidió llevar a la mesa las recetas de sus nonnas.

El resultado: un espacio luminoso con vista al río, donde cada plato —desde los gnocchi caseros hasta las pastas rellenas al estilo del sur— celebra la cocina italiana más auténtica, con ese equilibrio justo entre calidad y precio que invita a volver.

Acá no hay atajos: usan harinas italianas, ya que estas favorecen la cocción de la pasta al dente. Entre los imperdibles de la carta, está el plato servido en una canasta de queso parmesano y los ravioles Rivera, una joyita hecha especialmente para ellos por la legendaria fábrica Bologna de La Boca. Su nombre homenajea a la “ribera” porteña: ravioles cubiertos con una tapa de masa de pizza que, al cortarla, revela la sorpresa escondida debajo.

Dónde: Pierina Dealessi 1320, Puerto Madero.

Publicidad

9. D’Oro Italian Bar

Frente a la Legislatura porteña, este clásico con más de 25 años de historia sigue siendo uno de los secretos mejor guardados del barrio de Monserrat. En Perú 159, el ADN italiano se respira en D’Oro Italian Bar, desde la vidriera: pastas frescas, recetas simples y materia prima impecable.

Detrás del mostrador está la familia D’Oro, con Claudio (fundador y CEO) y sus hijos al frente de la operación. Su paso por Roma marcó el estilo del lugar: respeto por la tradición, obsesión por la calidad y una cocina que no se permite atajos. En el menú brillan los spaghetti nero mare e vermouth —con tinta de calamar, langostinos y chipirones— y los fetuccini ragù di manzo con salsa pomodoro y carne desmenuzada.

La casa, que ya es emblema porteño, planea ahora sumar una carta de vinos italianos seleccionados de distintas regiones. Un guiño más a ese espíritu romano que, desde 1999, sigue firme en el corazón de Buenos Aires.

Dónde: Perú 159, Monserrat.

10. Tita La Vedette

En La Paternal, Tita La Vedette nació en 2020 como un pequeño local en Chacarita de la mano de Mena Duarte, y rápidamente se convirtió en fenómeno gastronómico. Con su propuesta fresca, colorida y un manejo impecable de redes sociales, generó filas en la vereda y sold out diario. Hoy, en su nueva esquina en La Paternal, el ambiente combina mesas con manteles a cuadros, sifones de soda y flores, perfecto para sobremesas largas y charlas que se extienden más allá del plato.

La estrella indiscutida son las pastas veganas, creativas y llenas de sabor: desde el tri fungi relleno de girgolas y queso crema de cajú hasta la lasagna de berenjenas. Otras opciones, como la mila de girgolas con fusiles, permiten explorar la cocina veggie sin perder contundencia ni tradición. Frescura, identidad porteña y compromiso plant based hacen de Tita La Vedette un referente obligado para los amantes de la pasta vegana en Buenos Aires.

Dónde: Paz Soldán 4993, La Paternal.

Publicidad

11. Evelia

En Núñez, Evelia es el homenaje de Máximo Togni a su abuela italiana, Evelia, quien lo inspiró a cocinar. Este restaurante moderno con cocina abierta ofrece una carta italo-porteña que incluye gnocchi alla sorrentina, agnolotti de carne, capelletti de cabra con ricotta, azafrán y limón, y una milanesa napolitana de lomo que sigue la receta de su abuela (para los que nunca pueden dejar de pedir carne cuando salen a comer).

Todo se elabora en casa, desde las masas artesanales hasta los postres, como el tiramisú y el profiterole. Evelia fue reconocida por la Guía Michelin en 2024 y se destaca por su ambiente cálido y sofisticado.

Dónde: Campos Salles 1712, Núñez.

Recomendado
    También te gustará
    También te gustará
    Publicidad