Javier Sánchez

Vivir en el siglo XXI, absolutamente sumergida en la inmediatez de nítidas y vibrantes imágenes digitales, e insistir en fotografiar a paso lento es un acto de resistencia, una empresa que demanda paciencia y cuestiona nuestra relación con los significados que evoca el mundo visual. Paulina Zamora (México, 1988), a través de sus Episodios de nostalgia, invita al espectador a descubrir, capa por capa, la sensación de vacío e incertidumbre que permea en la generación sin futuro. Habiendo nacido en los ochenta y laborado en la industria publicitaria, la artista echa mano de su experiencia para construir un particular universo que danza entre lo documental y lo ficticio para sobreponerse a la ligereza del mundo del consumo. Capta sus fotografías en película de 35mm e imprime en serigrafía para alargar, aún más, el proceso de producción de imágenes que hoy se desvanece detrás de una pantalla. El resultado es una serie denominada Frescos que bien podría entenderse como el señalamiento de una paradoja: “Muchos productos que consumimos pasan por el proceso de muerte. De eso trata Frescos”, comenta. La segunda serie que compone la exposición, Cuando muera quiero que me entierren en el siglo XX, está conformada por imágenes de un fotolibro en proceso, que construye una falsa biografía a partir de una colección de fotografías que “revelan la historia de una mujer que vivió a finales del siglo pasado, por medio de la producción analógica de imágenes, la apropiación de archivos fotográfic

Libertad. Es lo primero que viene a la mente cuando pienso en la acción de restablecer algo. Podría decirse que es un lugar común; sin embargo, recuerdo que ese derecho inalienable es apenas un sueño para millones de personas. Todos ocasionalmente nos engañamos pensando en nuestras libertades como algo dado: la historia demuestra que no es así. Y si no es la historia, entonces el arte mismo funciona como despertador, provocador y herramienta de análisis del  entorno mismo. “La libertad consiste en nuestro derecho a cuestionarlo todo”, confirmó Ai Weiwei (China, 1957) hace 10 años y así, en una breve oración, podría resumirse una vida entera dedicada al arte y al activismo. Nacido en una familia de escritores perseguidos por Mao Zedong —fundador de la República Popular China—, Ai Weiwei vivió y se formó entre China y Estados Unidos; profundamente influido por las dolencias de su país natal y por el país del norte, donde absorbió la cultura local y su relación con el arte. Su trabajo cada vez se tornó mucho más crítico y llamó la atención de la cúpula política por su postura desafiante, pronto se convirtió en enemigo del Estado y su ideología antidemocrática. En el universo estético de AiWeiwei no hay distinción entre arte y política o, mejor dicho, todo arte es político. “Hago activismo justo para defender mi arte, por mis derechos esenciales. Para protegerlos me convertí en un activista y eso es inseparable de mi trabajo. El arte necesita protección, así como la libertad de e

Si la luz habla en las fotografías de Graciela Iturbide es porque ella misma descifró su lengua, le estudió con rigor y, como sólo pocos podrían hacerlo, aceptó también la penumbra y la sombra —¡vaya sombras las que habitan su imaginario!—. En el trabajo de la fotógrafa mexicana es notable el minucioso cuidado formal y, más sobresaliente aún, su curiosidad por lo que le rodea; un inquietante diálogo con el mundo. Hoy convertida en una de las figuras más importantes de la historia fotográfica, Iturbide presenta en la exposición Graciela Iturbide: Cuando habla la luz, bajo la curaduría de Juan Rafael Coronel Rivera, una retrospectiva de 45 años de carrera: un vasto portafolio del que elegimos 5 imágenes imprescindibles para tu recorrido.  Recomendado: Exposiciones para amantes de la fotografía. 

Plataforma de Imágenes Contemporáneas es una iniciativa del Centro de la Imagen coordinada por César González Aguirre. Funciona como un repositorio virtual al reunir el panorama de fotografía emergente producida desde México y se apoya en la propagación de internet. Esta plataforma digital genera comunidad y se configura al mismo tiempo como una herramienta de investigación para académicos e interesados en el arte. La idea es sencilla, albergar a artistas destacados de esta generación en un mismo sitio: con una semblanza corta, datos de contacto y una muestra de su trabajo. Un catálogo de artistas navegable por nombres o campos de acción ordenados por emojis diseñados por Mario Belta. Al entrar a la página principal puedes conocer a 270 autores dando click en su nombre o, mirar su obra por categorías agrupadas en emojis (46 en total) que funcionan como campos semánticos con temas como “arte conceptual”, “feminismo”, “identidad”, “ficción”, “migración” y decenas más. Esto te permite saltar de un autor a otro en un loop de imágenes creadas con distintos medios: desde la foto analógica hasta la asistida por drones, pasando por la estenopeica, el video y los gifs. PICS: centrodelaimagen.cultura.gob.mx/PICS/  Recomendado: Exposiciones de fotografía en la CDMX.

Luis Alberto Villegas Muñoz, “Ville”, es un incansable artista que desde hace 13 años produce narrativa gráfica bajo el sello de Ensamble Cómics. Desde esta trinchera y tras un largo proceso de investigación y análisis de la historia político-social mexicana, nos entrega una obra individual que pone el dedo en la llaga este año electoral: Lázaro y los alzados. Nuestro protagonista, Lázaro, es uno de los tantos obreros revolucionarios cuya vida sirvió de munición para el movimiento armado más voraz del siglo XX mexicano. Cuando, al calor de la última batalla, percibe que su muerte se aproxima lanza un juramento para volver si los males que combatió llegasen a repetirse. Lázaro muere… y revive en el México contemporáneo. Descarnado y sin memoria, atormentado por la ignominia y desesperado por entender cuál es su propósito ahora que no es más que un esqueleto, un personaje demoníaco pone al corriente a Lázaro: “Esta es tu guerra y esta es tu gente. ¡Les cortaron los caminos! ¡Pocos quedaron vivos!” La travesía de Lázaro se convierte entonces en un recorrido por los episodios más vergonzosos del país en los últimos cien años, narrados a detalle. Si Lázaro quiere recuperar sus preciados recuerdos —el nombre de su esposa e hijos, esas charlas entrañables con sus compas—, tendrá que sobrevivir a este camino tormentoso y traer, como evidencia, estampas del Taller de Gráfica Popular para recuperar, poco a poco, sus órganos vitales. Foto: Cortesía del autor Sucesos como la Guerra Crist

La ilustración es una disciplina tan fascinante como flexible. En su calidad de ocupación artística tiene la virtud de cruzar fronteras literal y figuradamente, mutar e insertarse en las aplicaciones comerciales de una manera que le sienta natural, casi injusta. En nuestro país la ilustración ha sido extensamente practicada y consumida desde que hubo oportunidad de hacerlo gracias a la tecnología mínima necesaria, ¿qué sería del folclor mexicano sin la recurrente aparición del dibujo como apoyo en carteles y boletos? ¿Qué habría sido del cómic nacional sin títulos como Kalimán, La familia Burrón o Memín Pinguín? Sin embargo, en este escenario saltaba por su poca difusión el trabajo de las ilustradoras mexicanas, ¡pero no más! Actualmente una plétora de mujeres ha tomado la batuta, sorprendiéndonos con su talento y visión fresca del mundo que nos rodea. De cara a la cuarta edición del Gran Salón México (#GSM2017), que se celebra este mes en Garash Galería, te presentamos cinco artistas invitadas cuyo trabajo tienes que conocer. También te recomendamos estos espacios para sumergirte en la historieta en la CDMX y el colectivo mexicano Ensamble Cómics que retoma la novela gráfica para contar mitos mexicanos. Garash Galería Álvaro Obregón 49, Roma. 5207 9858. Mié-dom 10am-7pm. Del 10 al 12 de noviembre. Gratis.

​El videoarte es un género que puede resultar difícil de abordar. Desde su concepción, tiene la meta de retar nuestras preconcepciones sobre narrativa, percepción del tiempo y espacio. A diferencia del cine o los cortometrajes (incluso aquellos experimentales), el videoarte no se preocupa por acomodar los cánones sobre historia, diálogo o personajes; en su lugar gira en torno a las posibilidades del mismo medio. Cuando se popularizó, aproximadamente en los setenta, significó un parteaguas por el salto tecnológico que representó. El trabajo de artistas como Andy Warhol, Peter Campus y Nam June Paik contribuyó a que esta nueva forma de diálogo se integrara al mainstream, retornándolo al curso comercial en forma de videoclips. En México, Ricardo Nicolayevsky fue uno de los artistas que abrió camino en la escena nacional con su serie de retratos en video de 8 y 16 milímetros Lost Portraits, un testimonio de lo que él llamó la “Generación perdida”. Estamos ante una disciplina en evolución, gracias a los avances en software y hardware, que sirven de referente para nuevas tendencias. Este mes la ciudad recibe la obra de Anri Sala y Yoshua Okón, dos exponentes contemporáneos de videoarte que no debes perderte. También te recomendamos las mejores exposiciones de fotografía en la CDMX y los 10 museos de arte contemporáneo, donde comprenderás más sobre la disciplina del videoarte.

Desde 1998 un grupo de artistas visuales y aspirantes a periodistas forjó una amistad que los llevó eventualmente a probar las aguas de la narrativa gráfica con un proyecto original. Sus nombres son Edgar Olivares, Susana Escobar, Federico Aguilar y Luis Alberto Villegas. Los cuatro se conocieron en la UNAM, ahí se descubrieron como grandes compañeros, colegas y compas, como se dicen usualmente mientras trabajan. Ensamble Comics fue el nombre con el que se agruparon en una sociedad-estudio independiente interesada en abordar la memoria histórica y las tradiciones orales de México por medio de la historieta como lenguaje principal. Primero comenzaron bocetando en casa de Luis Alberto sus relatos con los recursos que tenían disponibles —cada integrante ponía un poco de su dinero para sacar adelante el sueño de editar cómics. La formalidad llegó en 2010, cuando hicieron una asociación civil que les permitió mayor flexibilidad, cuentas claras, postularse para programas de apoyo artístico y lo más importante: promover su título estrella Las aventuras de Cristóbal El Brujo, un personaje por demás entrañable. ¿Quién es Cristóbal El Brujo?Cristóbal no es un héroe común. No emplea la violencia ni busca la fama, es el reflejo del buen hombre que quiere equidad y justicia en el mundo que le rodea. Sus herramientas son el ingenio y la astucia del mexicano. Desde 2005 ha protagonizado varias historietas independientes con premisas arraigadas en los mitos y leyendas de nuestra rica herenci

Desde 2011, el ritual del artista y patinador Tino Razo consiste en localizar albercas abandonas por medio de Google Earth; lo que para muchos sería una búsqueda del fracaso, para él es el campo de su fertilidad artística. Con motivo de su primera exposición en la Ciudad de México en Anonymous Gallery, platicamos sobre su incursión en la subcultura ollie, Los Ángeles y su quehacer fotográfico.  ¿Desde cuándo estás involucrado en la cultura skater? He patinado toda mi vida. De pequeño salía a hacerlo con mis hermanos, de eso hace 30 años. Así que podría decir que patino desde que tengo memoria. ¿Cómo fue que tomaste la cámara?Fue algo fortuito, ¿sabes? Realmente un día comencé a llevar la cámara a mis salidas y así fue como empecé mi proyecto. Pero siempre he sido un no-fotógrafo. Es decir, primero que nada soy patinador. Entonces Party in the Back no fue tu incentivo para salir, patinar y hacer fotografía…Éste es mi primer proyecto fotográfico; no me considero realmente fotógrafo, pero de alguna manera quería capturar el sentimiento, la vibra californiana. Entonces la muestra comenzó como algo no consciente de sí mismo. Simplemente llevaba mi cámara para traducir en imagen las experiencias que vivía. Party in the Back es una celebración de todo esto. ¿Qué te empujó a darle forma de libro?¡Fue una locura! Yo no me veía haciendo un proyecto artístico, pero los editores me ayudaron mucho. Gran parte del crédito es para ellos, me convencieron de que valía la pena. El proceso de c

El artista cinético es una figura peculiar en el panorama del arte contemporáneo. Sus “criaturas mecánicas” son particularmente populares ya sea por la majestuosidad de su construcción, sus movimientos articulados y su relación entrelazada entre tecnología y arte. Hay una obviedad en su trabajo que nos asalta cuando lo miramos: son obras producto de un intenso trabajo manual casi artesanal; pero también de un proceso científico. Un cruce entre investigación y experimentación con la materia. ”No hago mucha distinción entre ciencia y arte, pienso que desde que tenemos instituciones les gusta etiquetar a la gente como artistas o científicos; en realidad hay muchos autores que son más ingenieros y muchos de éstos que son más artistas de lo que creen”, aclara el también físico. Theo Jansen parece estar cómodamente instalado en un puente, entre la brecha que los divide. Vulgaris, Currens Vulgaris, Animaris Geneticus, Vermiculus, Rugosus Peristhaltis, Ordis A, Plaudents Vela y Currens Vaporis serán las ocho bestias mecánicas que caminarán en la nave del Laboratorio Arte Alameda, en la exposición Theo Jansen. Asombrosas criaturas, con la que el artista mostrará sus creaciones que lo han llevado a recorrer países como Perú y España, hasta transitar por el festival de arte y música Burning Man, en Nevada. Jansen pasó buena parte de su vida en los laboratorios, lo cual impulsó su inclinación científica con énfasis en la teoría de la evolución. Su combinación de arte y ciencia fue incide

Erinn Springer es una joven fotógrafa y documentalista de Wisconsin cuya visión particular de lo intangible sirvió para crear la serie Vicarious Vials, proyecto fotográfico donde retrató experiencias de sus viajes por el mundo y con el cual se presenta por primera vez en la CDMX en la galería White Cremnitz, en colaboración con la galería Breve.  Springer encontró dificultades para demostrar la sutileza de sus experiencias en el camino, por lo que comenzó a relacionarlas con objetos físicos. En cada viaje, ella destapaba un frasco al aterrizar y lo llevaba durante todo su trayecto. Al final el envase de vidrio era sellado aparentemente vacío. Con el tiempo esto dio como resultado una colección de objetos relacionados a vivencias junto a su labor fotográfica.  ¿Cómo surgió la idea de este proyecto?Me crié en un pequeño pueblo de 1,000 habitantes al norte de Wisconsin. Tengo dos hermanos mucho mayores, así que pasé gran parte de mi niñez viajando en carretera para visitarlos. Fui una niña creativa, pero estaba más interesada en el performance y la música que en las artes visuales. Siempre supe que quería asistir a la escuela en Nueva York, por lo que estudié diseño gráfico en Parsons, The New School for Design. Pasé un año en París, antes de comenzar la serie. Podría decir que el proyecto comenzó cuando tenía ocho años. Estaba en un viaje con mi mamá y pasamos por Nueva York. Era mi primera vez en una ciudad tan grande, lo que más recuerdo era el olor, era tan diferente a las t

Hannes Meyer fue un importante urbanista suizo cuya influencia en México es explorada a través de El principio co-op- Hannes Meyer y la idea de una creación colectiva, que se vale de una meticulosa revisión de su acervo, para detallar la ideología e impacto de sus proyectos más relevantes. El Museo Franz Mayer muestra 150 piezas entre las que destacan planos, maquetas, fotografías y documentos que testifican la obra de este personaje. Enlistamos tres de sus proyectos más importantes.

A escasos metros del Teatro Metropólitan, en la calle de José Azueta se encuentra Artecocodrilo Ediciones, una pequeña galería autogestiva que desde su trinchera propone una mirada profunda a la amplia, y a veces muy olvidada, gráfica mexicana. El proyecto nutre su oferta con varios artistas cuyos estilos satisfacen todos los gustos; desde lo onírico a lo figurativo, haciendo parada en lo kitsch. Su cartera conformada por Uriel Marín, Javier Arjona, Meño Miranda, Edgar Bacalao, Daniel Acosta, Daniel Berman, Nicolás Guzmán, Oscar de las Flores, Lucía Prudencia, Brenda Castillo y René Almanza es un abanico tan confortable como sorprendente. Si no sabes exactamente qué llevarte, te dará gusto saber que su personal es muy amable y dispuesto a resolver todas tus dudas. Las obras que encuentras en este diminuto espacio se extienden desde el dibujo, la xilografía, el grabado, la risografia y la acuarela para mostrar un universo visual del arte gráfico. Además también cuenta con otros productos como libretas, publicaciones independientes, prendas limitadas y postales para que no te quedes con las ganas de llevarte algo. Los precios de las obras son asequibles, puedes invertir desde $200 hasta $30,000, según lo que busques. Te recomendamos estar atento a su calendario de exposiciones para acudir a las inauguraciones, ya que así conocerás personalmente a los artistas y adquirir una mayor perspectiva de su inquietudes. Lo que distingue a Artecocodrilo Ediciones de otras galerías es que

En la céntrica calle de Colima está enclavada esta pequeña galería que comenzó como un proyecto pop up. Pimero, dentro de Casa Rosano después en Barrio Alameda, para instalarse finalmente en la Roma. No es sorpresa que para los artistas emergentes sea difícil encontrar espacios que se arriesguen a representarlos o exhibir su obra; el vasto mundo del arte puede ser abrumador para las personas interesadas en comenzar su propia colección privada. En este cruce de necesidades, Begoña Irazabal y Jorge Rosano, fundadores de la galería Breve, vieron una oportunidad que se materializó en este espacio acogedor cuyo catálogo va desde la pintura a la fotografía, pasando por la escultura y el dibujo; demás de asesorías a los compradores. “La idea es que las personas, sobre todo las que se acaban de independizar, puedan comprar a precios accesibles, para crear una colección personal que refleje quiénes son”, resume Begoña. Gente que quiera “empezar a construir colecciones pequeñas pero muy significativas y contundentes”. La cartera de artistas representados se alinea con el propósito de sus creadores; en sus cinco años de vida, Breve ha colaborado con mexicanos y extranjeros para exhibir trabajos íntimos de gran factura visual que sin duda pueden ser el punto de partida para el coleccionista primerizo. Su punto más fuerte es que encontrarás arte para todos los bolsillos con temas particulares, alejados de la homogeneidad y del mercado mainstream; además de asesorías. También te recomendam