Raúl Fernández

En la década de los setenta, en medio de uno de los momentos más fuertes de la revolución sexual, el cine mexicano pasaba por un proceso de transición alejándose de los melodramas clásicos del cine de oro para abrirle las puertas al género de ficheras. Un retrato de la vida nocturna de la ciudad que protagonizan vedettes, mujeres que con su glamour, sensualidad, carisma y talentos —como el canto, la danza y la actuación— engalanaban las noches.  Con la nostalgia de aquellos grandes shows de antaño nace Delirio Tropical, un espectáculo que reúne danza, música y teatro, con más de 15 artistas en escena. El show fusiona música alegre, bailes provocativos y libertad sexual para transmitir la esencia de aquellas noches de excesos, pero con un factor especial: empoderamiento LGBTTTI. En sí, entrar a Terraza Bichi-Cori –donde se realizan las funciones de Delirio tropical— nos transporta automáticamente al ambiente tropical y de fiesta. La luz tenue da un sentido de intimidad y complicidad entre el público y los artistas, a quienes verás rondando por las mesas con extravagantes atuendos invitando a que compartas una copa antes de iniciar la puesta. Sin embargo, las interpretaciones y la escenografía no siempre lucen tan glamurosos y cercanos a dichos show. La interacción del público con los artistas y la picardía de los diálogos, rescatan la obra y crean una atmósfera fiestera que ayuda a soportar la espera con energía para el espectáculo, en el que todos corean los boleros clásicos

Luego de tres años en YouTube como vlogger, Memo Luna estrenó su sencillo “Un beso (nada más)”, con el que comienza una nueva etapa de su vida, ahora saca del clóset su sueño de ser una estrella pop. ¿Quién es Memo Luna?Memo es alegre y enérgico, fuera y dentro del escenario. Un artista 360° con experiencia en danza y música. Desde pequeño inmerso en el mundo del arte. Sobre todo, Memo es alguien muy emocional (soy cáncer y eso lo paso a mis canciones). Antes de Memo Luna, había un chico que ocultaba su lado artístico a su familia, después surgió como un alter ego que le permitía expresar su parte más sensible. Esta es mi verdadera esencia y llegó para nunca más regresar al clóset.  Eres originario de Sonora, ¿cómo fue que llegaste a CDMX? ¿Sientes que esta ciudad te cambió? Todo inició con un intercambio por parte de la universidad, que me movió de Tijuana… Al pisar la ciudad —por primera vez en la vida y con todos los prejuicios que te inculcan en provincia sobre lo insegura, contaminada y caótica que puede ser— me topé con una ciudad llena de oportunidades para alcanzar mi potencial artístico y profesional. Decidí quedarme. Foto: Pepe Rendon ¿Cómo fueron tus inicios?Inicio en YouTube a los pocos meses de llegar a la ciudad, por influencia de mis dos roomies, una de ellas Pam Sashaa, quien se convirtió en mi mentora al ver cómo subía vídeos, los grababa y los editaba. El pasado 4 de octubre lanzaste “Un beso (nada más)”, ¿cómo fue el proceso para escribir tu primera canción

“En mi obra los colres explotan y se esfuman para generar imágenes referentes al juego, la sexualidad, la decadencia, la violencia y mi identidad en constante cambio”, afirma Javier Ocampo, quien a través de esculturas, instalaciones, fotografías y videos muestra situaciones divertidas —muchas veces incómodas— marcadas por lo sintético de la cultura pop y por una irreverencia ácida e ingeniosa. La obra del artista morelense radicado en la CDMX retoma el folclore, el género y la identidad sexual, y aunque la mayoría de su producción aborda temáticas LGBTTTI, cuenta con diferentes líneas: “lo conceptual, lo contestatario, lo radical y lo político”, para criticar las estructuras de poder en el gobierno y en la sociedad y para que escapemos de la heteronormatividad y la moral más tradicionalista a través del arte contemporáneo. Platicamos con él acerca de su trayectoria como artista queer y de su exploración con lo prohibido, lo gracioso y lo cotidiano. ¿Está lo que eres plasmado en tu obra? Mi pasión es el color. Siempre recurro a paletas estridentes, fuertes y contrastantes. En la universidad, luego de una clase sobre cine y cultura gay, cambié mi panorama sobre el arte y la intimidad. Decidí expresar quién era a través del arte: comencé a abordar temas como búsqueda de identidad, sexualidad, nuevas representaciones y denuncia social. Sobre el folclore, mi interés nace de mi propio contexto; vengo de una familia de clase media baja, el álbum familiar está lleno de anécdotas cur

En nuestra revista del mes de junio 2019 hacemos un recuento breve en torno a nuestra cultura visual —marcada por el cuerpo, el placer, la amistad, el erotismo y la sexualidad— con conciencia de género y generada desde la Ciudad de México para presentarte a ocho fotógrafos cuyo trabajo documenta o se inspira en lo que como comunidad LGBTTTIQ padecemos y gozamos en un sistema mayoritariamente heterosexual. A propósito de lo anterior te damos recomendaciones para que comprendas la fotografía sexodiversa, desde un libro hasta películas.  Recomendado: Fotógrafos LGBTTTI que debes conocer y seguir.

Uno de los cuartetos más fabulosos de la historia de la televisión está de regreso.  Will,Grace, Jack y Karen se despidieron hace más de una década cuando la temporada ocho de Will & Grace (David Kohan, Max Mutchnick, 1998) llegó a su fin. Pero luego de un repentino reencuentro del elenco en 2016 —invitaban a los estadounidenses a votar en las elecciones presidenciales del mismo año— se anunció el regreso de la mítica serie gay con 16 capítulos en 2018. Este 13 de marzo de 2019 la serie estrena temporada con 18 capítulos dirigidos por James Burrows (Friends).  Foto: Cortesía FOX ¿De qué iba la serie?Si eres demasiado millennial y no tienes idea de qué estamos hablando, aquí un poco de qué trata. Esta serie americana partió del relato de la vida de Will (Eric McCormack), un abogado gay —sí, en la televisión y en plena década de los noventa —, quien es el mejor amigo de Grace (Debra Messing), una diseñadora de interiores. Ellos jóvenes, ahora ya no tanto, comparten departamento en Nueva York; solteros, fanáticos del cine francés, el póker, los concursos de televisión y las relaciones con hombres complicados. Se tienen el uno al otro para consolarse. Los otros miembros del cuarteto son: la alcohólica y adinerada asistente de Grace, Karen (Megan Mullally) y el vecino Jack (Sean Hayes), este último además de haber sido camarero, actor, enfermero y hasta ejecutivo de un canal de televisión, también es gay. En los nuevos episodios se demuestran que el vínculo entre este cuarteto per

Con un aire de nostalgia a la movida madrileña, mucho pop, colores estridentes y letras que van desde la dulce “Oso Panda” hasta la trágica historia de amor “Telenovela”, Papa Topo es una banda española (Mallorca) nacida en 2008 y liderada por Adrià Arbona.  Conocimos un poco de los inicios del cuarteto que conquistó a la escena de música indie española y sobre todo a la comunidad LGBTTTI. Adrià Arbona, su vocalista, nos cunta sobre su paso por México en una gira en solitario, previo a su presentación el 1 de marzo. ¿Cómo nació Papa Topo?Mis papás me compraban instrumentos de juguete. A los 16 años tuve mi primer ordenador y comencé a aprender sobre softwares musicales. Tenía un novio, Jordi. Un día, para darle un regalo le hice unas canciones; las subí a Myspace y el primer comentario fue de Guille Milkyway, el vocalista de La Casa Azul, que era mi grupo favorito. A partir de ahí decidí hacer más canciones.  ¿De dónde viene el nombre Papa Topo?Es una tontería porque era una broma que tenía con Jordi; al regalo que le di le puse ese nombre, pues era como él me llamaba.  ¿Cómo fue el proceso para escribir tu primera canción?Tenía 16 años y era muy intenso, enamoradizo. Conocí a un chico que vivía en Barcelona y yo en Mallorca. La canción iba justo de eso, sobre cómo lo añoraba a distancia, cuando estaba triste la ponía en mi casa. Ahora hago cosas más universales. Foto: Cortesía del artista¿Cómo fue recibir tu primer CD?Fue genial. Luego de que "Oso panda" se hiciera viral, me

Si alguna vez escuchaste que los opuestos se atraen, el nuevo show de Netflix de Raúl Meneses y Coco Celis lo comprueba. Luego de un año con un show sold out en Cine Tonalá y una última aparición en Cinema Coyoacán, este duo dinámico llega a la plataforma en línea cargados de vivencias personales que nos hacen reír de la vida y olvidarnos un poco de las penas.  En Carrusel de ternura, ambos standuperos presentan monólogos que se van alternando. Identificamos la intervención de cada uno de ellos con un cuadrado neón que se pone azul con Raúl y rojo con Coco. Un formato no muy grato que pareciera romper con la continuidad de algunos chistes.  La unión de Coco y Raúl se dio luego de abrir juntos uno de los shows de Carlos Vallarta en la CDMX. Desde entonces, Raúl —a su vez miembro del colectivo de standuperos LGBT X Somos Chavas—  encontró el compañero perfecto del crimen. A simple vista su unión parece improbable: mientras Raúl se define así mismo como estructurado y ñoño, Coco se caracteriza por ser más espontáneo y relajado. Así se convirtieron en Batman y Robin de la comedia. Con el humor que lo caracteriza, Raúl saca provecho de su estatura pequeña y voz aguda para darnos carcajadas con temas que van desde la comida, pasando por los estereotipos gays, hasta chistes un poco subidos sobre su abuelita (sí, su abuelita) y Coco nos recuerda a los robachicos, el verdadero amor de su vida y las frases que usaban nuestros padres para regañarnos. Raúl tiene el propósito de luchar po

Felix Morales y Floyd L no son una pareja común y corriente; imaginan historias fantásticas, crean personajes subversivos inimaginables y luego los plasman en cómics dirigidos a la comunidad LGBTTTI. Para ello crearon FnF Comics, un colectivo creativo que habla sin pelos en la lengua de experiencias, personajes y narrativas que hacen honor al amor entre personas trans. En un mundo de cómics con superhéroes que parecieran machos alfa y chicas bien agraciadas y entalladas, Felix y Floyd se autodenominan "las ovejas negras de las historietas" por presentar figuras fuera de la heteronorma y que conectan con la comunidad gay.  Sus obras nos sumergen en mundos cómicos, fantásticos y de horror, sin perder un tono caricaturesco y colorido. Sus personajes, además de ser diversos sexualmente, también lo son culturalmente, pues mezclan la riqueza cultural de México, con Felix y de Estados Unidos, por parte de Floyd. Sus cómics originalmente estaban en inglés, pero la aceptación del público luego de presentarse en eventos como Navitrans (2017) los llevó a lanzar este año sus primeros trabajos en español. Hasta ahora han publicado cuatro títulos: Between Hay and Grass, Love Labs, El Anzuelo y Mal de Ojo; en este último la historia  nos traslada al viejo Oeste, con personajes como Sheriff Tumbleweed, quien tiene un bochornoso pasado y está en busca de Vicente (el Alacrán), el bandido más buscado de la zona, quien podría ayudarle a recuperar el respeto de la gente del pueblo. Todos están d

En la víspera de Navidad, Clara, la ahijada consentida del juguetero Herr Drosselmeryer y su hermano Fritz observan los juguetes que les ha traído su padrino. Es así como comienza la historia de El cascanueces, la magna obra de Ernst Hoffmann y  Piotr Tchaikovsky que no sólo es un clásico del ballet sino también de la época decembrina. En esta ocasión el coreógrafo y bailarín Raúl Tamez (Premio Nacional de Danza Guillermo Arriaga 2016) y el director, Rodrigo Gonzalez trasladan la magia de la puesta a la Pista de Hielo San Jerónimo, bajo el título El cascanueces, danza sobre hielo.  Tamez y González toman la narrativa preexistente de este clásico para hacer una reinterpretación con códigos contemporáneos que exploran otras posibilidades de movimientos a partir de la música original de Tchaikovsky, además de introducir y alternar el patinaje artístico y presentarse en un espacio alternativo. De acuerdo a la producción “el objetivo es romper los esquemas tradicionales y dirigirse un público ávido de espectáculos innovadores”.  En un escenario blanco y completamente iluminado –efectos de luces simples- los 12 bailarines del elenco hacen lo suyo en el centro de la pista mientras cinco patinadores alrededor completan la imagen que resulta más atractiva, dinámica y diferente de lo que normalmente vemos en las puestas tradicionales de este clásico de Navidad. Aquí más opciones de obras de teatro navideñas en la Ciudad de México.  El cascanueces, danza sobre hielo Pista de hielo San j

En un mundo donde se producen imágenes a diestra y siniestra, fue un gran acierto que se creará un espacio como el Centro de la Imagen, dedicado a la formación, investigación y divulgación fotográfica. Como parte de esta labor, la Secretaría de Cultura organiza la segunda edición de FotoMéxico, festival que alberga el escenario más relevante de la fotografía, convirtiéndolo en el más importante de nuestro país.  El Festival Internacional de Fotografía nos trae por segunda ocasión 147 exposiciones de más de 600 artistas tanto nacionales como internacionales. Los programas que ya son parte fija del festival estarán bajo el término de Latitudes, exhibición que explora el punto de vista plural, geográfico, antropológico y multidisciplinario; y Red Fotoméxico, plataforma que da visibilidad a diferentes proyectos nacionales, de estados como Chihuahua, Guerrero, Hidalgo, Michoacán y Sonora. Como parte de las exposiciones podremos disfrutar la Colección fotográfica de Pedro Slim en el Museo de Arte Moderno, la obra de Alfred Briquet en el MUNAL, Retratos de una cultura andina de Martín Chambi y sus contemporáneos en el Museo Tamayo Arte Contemporáneo, entre otras 140 más. 

A principios de 2020, conocimos Dreams. Fantasy Lab, la experiencia inmersiva que nos hizo trasladarnos al mundo de los sueños, y además se convirtió en uno de los spots favoritos de los instagramers. Sus instalaciones lumínicas y experiencias sensoriales fascinaron a muchos amantes del arte digital, el sonido envolvente y otras tecnologías.Sin embargo, luego de un año sin actividad debido a la pandemia de COVID-19 el espacio interactivo reabrió e incluyó una gran sorpresa: Art Nights Dreams, exposición inmersiva que sucede en las mismas salas de Dreams, las cuales están intervenidas con ilustraciones, videomapping, hologramas, arte fractal y animaciones provenientes de ocho artistas contemporáneos. Mostrando así, una nueva perspectiva del concepto de los sueños y dándonos una montaña rusa de emociones que van desde momentos de relajación hasta pesadillas.  Adéntrate al ya conocido cuarto infinito de Dreams, donde la variación de luz al ritmo de la música nos arrulla para nuestro primer sueño: delirio. Aquí el escultor y modelista Mr. Mitote nos muestra a sus personajes, que destacan por sus ojos saltones, colores chillantes y aspecto caricaturesco. Pasa al caleidoscopio, para muchos visualmente la gran estrella del recorrido. Una habitación con pantallas y espejos que esta ocasión alberga las imágenes de Julius-Horsthuis, un artista fractal holandés destacado por su trabajo en películas, videos musicales y exposiciones en galerías de arte digital de todo el mundo.  Si lo que