1. Doppel
Esto es coctelería hardcore, pura y dura. “Lo único que hacemos es tragos con buenas bebidas, no todos los gins le quedan bien a todos los cócteles”, nos dijo Guillermo Blumenkamp, que para poder trabajar con esta libertad no está casado con ningún sponsor.
“Cuando nadie servía aún aperitivos, nosotros lo hacíamos. No se usaba el vermú. No existía el spritz en Buenos Aires. El gin no se tomaba como ahora”, reflexionó. El cóctel está garantizado y eso es lo que te van a dar en Doppel: “Sos un peregrino que llega y te recibimos, del abrigo a todo lo demás. Cuando vengas vas a sentir que algo te rozó. La vas a pasar bien. La noche empieza y no se sabe dónde termina”. No tienen camareros, (son todos bartenders) ni playlist. “Estamos en los 50 Best Discovery. No participamos del concurso porque no queremos tener esas obligaciones, estamos para otra cosa. Para darle de tomar al burgués y al obrero que todos tenemos dentro”.
El dato: hacen el mejor old fashioned del mundo. Eso escribió el crítico de coctelería del New York Times, R. Simonson, que tiene el trabajo de viajar probando cientos de sus versiones.
Dónde: Juan de Garay 500.
Martes, miércoles y jueves hasta las 2 am. Viernes y sábado hasta las 4.