Carolina Cerimedo

Buenos Aires never stops, and its gastronomic scene doesn't either. From a luxury grill to a vegetarian warehouse, a 1952 diner, botanical haute cuisine, signature fine dining, charcuterie on the sidewalk, and nostalgic Porteño food in a market. We make it easy for you or we make it short: these are its essential restaurants.

Buenos Aires no para, su movida gastronómica tampoco. De una parrilla de lujo a un galpón vegetariano, un bodegón de 1952 , alta cocina botánica, fine dining de autor, charcutería en la vereda y comida porteña nostálgica en un mercado. Te lo ponemos fácil o te la hacemos corta: estos son sus restaurantes esenciales.

No todo es el boom de las pizzerías napolitanas. Hay muchas otras ideas que se suman al generoso repertorio de los mejores restaurantes italianos de Buenos Aires. Recorrimos los barrios gastro de moda y los emblemáticos, como Boedo y La Boca, nos fuimos hasta Campana y Pilar para relevar los platos de hoy y los de siempre, los que nos hacen viajar por un rato a la bella Italia. De una esquina de Palegiales a una de Martinez, de una pizzería romana, a una cantina adriática, de un pastificio a una pasticceria o un mercato. De la nueva generación, a los tanos de toda la vida. Van nuestros 16 elegidos de esta cocina que a los argentinos nos encanta, candidata a patrimonio inmaterial de la humanidad, por su sustentabilidad y diversidad biocultural.

For going out during the week, for staying out late, for transporting yourself to a beach or another era through a cocktail. Discover signature drinks and relive the classics. We sit at the best bars in the city to tell you which ones they are. Are you up for a drink?

Para salir en la semana, para volver bien tarde, para trasladarte en un cóctel a una playa o a otra época. Descubrir tragos de autor y revivir los de siempre. Nos sentamos en las mejores barras de la ciudad para contarte cuáles son. ¿Estás para tomar algo?

RAGGIO OSTERIA El restaurante italiano más nuevo de la Guía Michelin, dentro de un hotel palermitano. Tiene un poco más de un año y ya empezó con el pie derecho: está en las recomendaciones de la prestigiosa Guía Michelin. Gastronomía italiana con materia prima argentina, es la fórmula de este reciente éxito alojado dentro del Hotel Pleno Palermo Soho. Anchoas de Mar del Plata, ají de Salta y oliva de Mendoza en unas artesanales pastas casarecce. Aceitunas negras de La Rioja y alcaparrones de Santiago del Estero, para la salsa puttanesca. Los pistachos son de San Juan; la carne y los vegetales, del campo bonaerense. En Raggio Osteria se reúnen los productos de nuestra tierra y nuestro mar, con las recetas tradicionales que Sebastián Raggiante trae de su Bologna natal. El viaje no fue directo, tuvo muchas escalas en el camino, como su paso por el consagradísimo El Bulli, un Relais & Châteaux de la Costa Azul como Le Petit Nice y el sofisticado ristorante Cracco de Milano. En Mallorca, cuando era jefe de cocina, el mediterráneo Gadus se llevó una estrella Michelin. Cuando emigró a Buenos Aires, supo tener su propio lugar (junto a su expareja), se llamaba Moreneta y quedaba en Montserrat. Pero todo esto es parte del pasado de Sebastián, a quien el presente lo encuentra en un muy buen momento. A poco de inaugurar su ostería, la estrella lo vuelve a tocar. Algo que lo tiene tan contento como ocupado. Raggio Osteria Sentarse a la mesa de Raggio Osteria, una experiencia que involu

La comida entra por los ojos, y en el caso de la de Tomás Treschanski, también entra por la cabeza. Comer una idea es la propuesta de este jovencísimo chef revelación.”Un embajador de la próxima generación” lo llamó Michelin y le dio el Young Chef Award. El restaurante de cocina conceptual del cocinero más joven de América en recibir el premio es también una estrella Michelin. Un revolucionario del fine dining. Cuando creíamos que este formato de alta cocina estaba agonizando en Buenos Aires, él lo hizo resucitar. O mejor dicho, renacer, porque le otorgó una nueva vida disruptiva, en una casa recuperada de Villa Crespo, donde hasta las paredes transmiten sensaciones. Arte en los platos y en la ambientación Trescha Para llegar hasta acá hay que darle por Juan B. Justo al fondo, pasar por la cancha de Atlanta, y por decenas de negocios de venta de repuestos de autos. Las cortinas metálicas de los talleres mecánicos están bajas, el barrio en silencio, y la barra de Trescha encendiéndose con el atardecer. Nos reciben con una copa de champagne francés, mientras Cerati pone el rock. Es una barra muy cuidada, donde también nos alcanzan los snacks: macarrón de remolacha y mandarina con praliné de maní picante, tartaletas de texturas de puerro y de tartar de wagyu, miso de frutillas y mandioca frita. Blinis de tinta calamar, vieiras, melón y cecina; beignet espumado de kimchi y azafrán. Trescha Y eso que todavía no hemos pasado al salón, donde el chef counter es directamente un la

Aquí todo está dispuesto para pasarla y sentirse bien. Subís la escalera y entrás en un sitio único. El local fue equipado con tres contenedores que trajeron desde Japón repletos de todo lo que puedas imaginas: desde la heladera Hoshizaki -que no se empaña-  a las tablas, los cuchillos y la vajilla, que complementan con piezas locales artesanales. La armonía que sentís en la ambientación también se siente en el cuerpo. Cocina japonesa moderna sin gluten, baja en sodio, grasas y azúcares. ¿Acaso se puede pedir más? Seguro nunca probaste nada igual, simplemente porque ellos elaboran todo, desde las masas a las salsas, tapas de harina de arroz, texturas de mandioca. Cada ingrediente es orgánico y fermentado en casa, algunos por un par de días, otros por meses o un año. El nuevo restaurante combina la trayectoria del chef Leo Lanussol y su reinterpretación del street food japonés con los dones del sushiman Fabián Masuda, pionero en ofrecer omakase en Buenos Aires. La dupla trae una propuesta vanguardista, 100% libre de gluten, baja en sodio, grasas y azúcares, lo que implica un trabajo constante de investigación. “La biblioteca de fermentos es el corazón de Nika, allí elaboramos hasta nuestra propia salsa de soja, porque todas las industriales tienen trigo”, nos explica Leo.    Nika Club Omakase Una opción es arrancar por el bar, especializado en sake y whisky japonés, con un acervo de 900 botellas. Para eso se pensaron los snacks, para que puedas demorarte tranquilo en esta ba

Para vivir la tradición del asado argentino en primera fila, frente al fuego y al chef parrillero. Las carnes y los vinos son protagonistas, aunque también hay opciones vegetarianas. Te contamos a detalle nuestra experiencia en esta parrilla argentina que hace todo bien. Fogón Asado está emplazado en una casa antigua de Palermo reformada y decorada con un gusto tan exquisito, como los sabores argentinos que propone esta parrilla de lujo en la que nunca se acaba el fuego. Nos reciben con el perfume a quebracho, que ya está chispeando, y un Lado Luminoso, el cóctel de la casa con torrontés, gin infusionado con yerba mate, vermú y néctar de flores de sauco. En seguida llega el sifón, otra de las estrellas de la noche. Fogón Asado La ceremonía continúa al sentarse en la front row de este desfile de tradiciones, ante una parrilla que fue diseñada a medida: en las planchas van los vegetales orgánicos; en el fogón, las proteínas de La Pampa, de animales de pastura que preservan el sabor característico de la raza Angus. La leña viene del Norte: la madera blanca, más liviana, la usan para prender el fuego; la roja, para lograr las brasas.   Fogón Asado Nos presentan los cortes que vamos a probar: ceja con crema de coliflor y choclo al rescoldo, ojo de bife con puré de boniatos, un costillar -que tiene 8 horas de cocción con distintas técnicas- y matambre, una particularidad argentina, una pieza que tiene personalidad propia. La degustación se completa con berenjena ahumada con ric

Ticking off the main tourist attractions on a city break is all well and good, but it’s only when you veer off down a side street or stumble across a leafy avenue that you really get a glimpse of a city’s true character. Streets are the heart of local life; they’re where communities come together, where new local businesses become go-to staples and where urbanites go out, hang out and have fun.  So what are the world’s coolest streets worth a stroll right now? To find the answer, we reached out to our global team of local expert editors and contributors, who each made a case for the coolest street in their city. We then narrowed down the selection to create a definitive ranking of the best avenues, thoroughfares, backstreets and boulevards on the planet. And so you have it: the coolest streets in the world’s best cities. Over the last few years, street life has gone through something of an evolution. Outdoor drinking and dining, at one point a temporary measure, has become a staple on many of the streets on our hotlist; only bolstered by green initiatives like pedestrianisation and low-traffic avenues. In other words, these streets have become much more walkable and pleasant places to spend our time. On every street on this list, there are bold, creative new ventures in food, drink, nightlife and culture: from listening bars to repurposed heritage buildings, these streets are where you’ll find a city’s most exciting cultural trends. Ready for a wander?  RECOMMENDED: 🏘️ The w

La comida entra por los ojos, y en el caso de la de Tomás Treschanski, también entra por la cabeza. Comer una idea es la propuesta de este jovencísimo chef revelación.”Un embajador de la próxima generación” lo llamó Michelin y le dio el Young Chef Award. El restaurante de cocina conceptual del cocinero más joven de América en recibir el premio es también una estrella Michelin. Un revolucionario del fine dining. Cuando creíamos que este formato de alta cocina estaba agonizando en Buenos Aires, él lo hizo resucitar. O mejor dicho, renacer, porque le otorgó una nueva vida disruptiva, en una casa recuperada de Villa Crespo, donde hasta las paredes transmiten sensaciones.  Leé la nota completa.

Aquí todo está dispuesto para pasarla y sentirse bien. Subís la escalera y entrás en un sitio único. El local fue equipado con tres contenedores que trajeron desde Japón repletos de todo lo que puedas imaginas: desde la heladera Hoshizaki -que no se empaña-  a las tablas, los cuchillos y la vajilla, que complementan con piezas locales artesanales. La armonía que sentís en la ambientación también se siente en el cuerpo. Cocina japonesa moderna sin gluten, baja en sodio, grasas y azúcares. ¿Acaso se puede pedir más? Seguro nunca probaste nada igual, simplemente porque ellos elaboran todo, desde las masas a las salsas, tapas de harina de arroz, texturas de mandioca. Cada ingrediente es orgánico y fermentado en casa, algunos por un par de días, otros por meses o un año. El nuevo restaurante combina la trayectoria del chef Leo Lanussol y su reinterpretación del street food japonés con los dones del sushiman Fabián Masuda, pionero en ofrecer omakase en Buenos Aires. La dupla trae una propuesta vanguardista, 100% libre de gluten, baja en sodio, grasas y azúcares, lo que implica un trabajo constante de investigación. “La biblioteca de fermentos es el corazón de Nika, allí elaboramos hasta nuestra propia salsa de soja, porque todas las industriales tienen trigo”, nos explica Leo.  Una opción es arrancar por el bar, especializado en sake y whisky japonés, con un acervo de 900 botellas. Para eso se pensaron los snacks, para que puedas demorarte tranquilo en esta barra, acompañando tu be

Para vivir la tradición del asado argentino en primera fila, frente al fuego y al chef parrillero. Las carnes y los vinos son protagonistas, aunque también hay opciones vegetarianas. Te contamos a detalle nuestra experiencia en esta parrilla argentina que hace todo bien. Fogón Asado está emplazado en una casa antigua de Palermo reformada y decorada con un gusto tan exquisito, como los sabores argentinos que propone esta parrilla de lujo en la que nunca se acaba el fuego. Nos reciben con el perfume a quebracho, que ya está chispeando, y un Lado Luminoso, el cóctel de la casa con torrontés, gin infusionado con yerba mate, vermú y néctar de flores de sauco. En seguida llega el sifón, otra de las estrellas de la noche. La ceremonía continúa al sentarse en la front row de este desfile de tradiciones, ante una parrilla que fue diseñada a medida: en las planchas van los vegetales orgánicos; en el fogón, las proteínas de La Pampa, de animales de pastura que preservan el sabor característico de la raza Angus. La leña viene del Norte: la madera blanca, más liviana, la usan para prender el fuego; la roja, para lograr las brasas. Nos presentan los cortes que vamos a probar: ceja con crema de coliflor y choclo al rescoldo, ojo de bife con puré de boniatos, un costillar -que tiene 8 horas de cocción con distintas técnicas- y matambre, una particularidad argentina, una pieza que tiene personalidad propia. La degustación se completa con berenjena ahumada con ricota cítrica, provoleta crocant

Tiene un poco más de un año y ya empezó con el pie derecho: está en las recomendaciones de la prestigiosa Guía Michelin. Gastronomía italiana con materia prima argentina, es la fórmula de este reciente éxito alojado dentro del Hotel Pleno Palermo Soho. Anchoas de Mar del Plata, ají de Salta y oliva de Mendoza en unas artesanales pastas casarecce. Aceitunas negras de La Rioja y alcaparrones de Santiago del Estero, para la salsa puttanesca. Los pistachos son de San Juan; la carne y los vegetales, del campo bonaerense. En Raggio Osteria se reúnen los productos de nuestra tierra y nuestro mar, con las recetas tradicionales que Sebastián Raggiante trae de su Bologna natal. El viaje no fue directo, tuvo muchas escalas en el camino, como su paso por el consagradísimo El Bulli, un Relais & Châteaux de la Costa Azul como Le Petit Nice y el sofisticado ristorante Cracco de Milano. En Mallorca, cuando era jefe de cocina, el mediterráneo Gadus se llevó una estrella Michelin. Cuando emigró a Buenos Aires, supo tener su propio lugar (junto a su expareja), se llamaba Moreneta y quedaba en Montserrat. Pero todo esto es parte del pasado de Sebastián, a quien el presente lo encuentra en un muy buen momento. A poco de inaugurar su ostería, la estrella lo vuelve a tocar. Algo que lo tiene tan contento como ocupado. Leé la nota completa